La ciudad de Bhopal, considerada como "la Bagdad de la India", es la capital del estado de Madhýa Pradesh, uno de los más pobres de la India. En la madrugada del 3 de diciembre de ese mismo año, una fábrica de pesticidas propiedad de Unión Carbide sufrió un escape de 42 toneladas de isocianato de metilo, provocando la muerte de miles de personas y dejando un reguero de más de medio millón de afectados.
Hasta mediados de los años 50, las plagas devoradoras de cosechas hacían estragos en cualquier latitud del mundo. Uno de los pocos mecanismos eficaces de defensa con que contaban los agricultores era el DDT, potente contra los pulgones y otros parásitos pero nocivo para el hombre, ya que el DDT era altamente tóxico tanto por ingestión como por contacto. De hecho había comenzado a ser prohibido en numerosos países, aunque continuaba empleándose en los más subdesarrollados por la falta de un sustituto igualmente eficaz, barato e inocuo. Había una verdadera necesidad de encontrar ese producto milagroso que, además de conseguir los mismos resultados que el DDT, fuera barato, no afectara a la salud pública y fuera respetuoso con el medio ambiente. En esta línea de trabajo, Unión Carbide crea el SEVIN en 1957.
Este pesticida cumplía con todos los requisitos anteriores: económico, eficaz contra las plagas más comunes y completamente inocuo para el hombre y el medio natural. Sin embargo, el proceso de fabricación implicaba el empleo de unas sustancias altamente tóxicas como la monometilamina (o metilamina anhidra) e incluso potencialmente letales como el gas fosgeno. La reacción de estos gases entre sí forman el isocianato de metilo (MIC), que es la base de la producción del SEVIN y una de las sustancias más inestables y peligrosas de la industria química.
Unión Carbide se introduce en el mercado indio, construyendo en 1967 una pequeña fábrica en Bhopal para la formulación del concentrado de SEVIN.
En 1975 culminan los trabajos de ampliación de la planta, pero hasta 1980 no empieza a producir el isocianato de metilo. La euforia comercial de Unión Carbide se empieza a esfumar a finales de los setenta, cuando la perseverancia de un período seco arruina las cosechas de numerosos campesinos.
Ante la acumulación de pérdidas se establece un plan de viabilidad que incluye la contratación de personal no cualificado, la corrosión de los materiales y equipos y la desactivación de los planes de seguridad de la planta.
Así llegamos al día de la catástrofe. Era un 3 de diciembre de 1984; sólo había transcurrido una media hora desde medianoche. Muchas familias bhopalíes habían elegido esta noche por sus buenos augurios para celebrar los esponsales de sus hijos. Coincidía con la celebración de un importante concurso poético al que acudía un numeroso público procedente de toda la región e incluso de lugares más lejanos. Por este motivo, toda la ciudad estaba engalanada y mucha gente disfrutaba de la noche fuera de su hogar. Más de un millón de personas de hallaban en Bhopal aquel fatídico día.
Dominique Lapierre narra todos los acontecimientos que ocurrieron en Bhopal ese día, las consecuencias mortales, la influencia de las grandes multinacionales, la hipocresía de paises y lo poco que vale una vida en la India.
Probablemente es el libro más duro que haya leído nunca.