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lunes, 24 de agosto de 2009

Memoria de Georges el amargado (Octave Mirbeau)


Amargado? eso es decir, más bien, poco. Octave Mirbeu nos introduce, a través de la vida de George, en las miserias y penurias existenciales del París de finales de siglo.
Las penurias morales de una sociedad conformista reflejada en toda la vida de George, un niño que creció sin ningún tipo de amor, que nunca lo conoció, que nunca supo lo que era la ternura, el cariño humano (sólo su adorado perro le hizo ver la parte "humana" de la vida).
Esta infancia le marcará a lo largo de su vida, su triste partida de su casa hacia París, su triste vida laboral, su triste vida en casa junto a una mujer a la no ama y a la que nunca amó y en la que ve reflejada toda la fealdad humana y social que le rodea. En su mujer refleja todo el odio carnal y material, mientras que es en la sociedad parisina de finales del XIX donde refleja su odio moral.
Pesimista y pusilánime, George nos muestra una vida carente de fin, en la que es incapaz de mover un dedo, no ya por nadie, sino tampoco por él mismo cuando relamente necesita dar un golpe encima de la mesa y sobreponerse a las desdichas, como si se rindiera a la vida, a la humanidad.

Escrita en primera persona, me parece una gran obra, hilarante a veces (el nulo interés de su mujer por leer las memorias y la historia de las gallinas son relatos fantásticos) y dura en otras (su actitud ante las sospechas que recaen sobre él...)

Fragmentos de la obra.



Autoretrato